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DE LUJOSOS HOTELES A BARROTES GRISES Y PANTALONES NARANJAS

Un fenómeno muy comentado en estos días, es la visita de Paris Hilton a la cárcel; resulta que el domingo fue la entrega de los Movie Awards de MTV, dónde recibió críticas bastante desagradables de este hecho, pero al parecer fueron lo suficientemente hirientes como para que acabando el evento agarrada de la mano de su mamá se fuera a su nuevo hogar, o sea la cárcel. Lo que es un hecho es que debe reconocer que está en la parte de la cárcel que sólo tiene 12 celdas y están hechas para estrellas y funcionaros públicos, lo que significa que está aislada de 2,200 presas, o sea nada mal le irá a la niña., por lo que no se puede quejar.

Lo increíble de este acontecimiento, es ¿por qué el gran revuelo al ser una figura pública?, la publicidad y la mercadotecnia intervienen y sacan provecho de la situación y lo convierten en una estrategia de imagen y de muchas más ganancias económicas, ya que hasta accesorios y artículos del evento se encuentran a la venta en apoyo “moral” a la cantante y mediocremente actriz. Su mamá comenta que es un tiempo que a Paris le servirá para recapacitar su pecaminosa vida, cree que después de su salida el 26 de Junio, ya no se juntará con la white trash de Britney, ni enseñara su vagina libremente, ni se meterá tanta droga o seguirá manejando ebria, que fue por lo que la llevaron al tambo.

Pero en fin, esto es un ejemplo de los alcances que puede tener la publicidad y las estrategias de mercadotecnia hacia una persona, realmente somos capaces de crear esta expectativa a nivel mundial, porque realmente ¿cuánta gente entra en la cárcel y ni nos interesa?, pero por buenas estrategias, se logran casos excepcionales como este, lo que sólo tendríamos que definir, es ¿qué tipo de comunicadores seremos, los que toman aspectos de oso de las personalidades, para convertirlos en un producto redituable? o ¿los que se preocupan por mejorar aspectos sociales de nuestro planeta?, no necesitas contestarme ahorita, ¡mejor piénsalo!